La vida de Clara Campoamor (1888-1972) es la de una mujer fuerte y digna, que hizo frente a circunstancias adversas y defendió sus convicciones por encima de sus intereses personales. Sus orígenes humildes postergan sus estudios de bachillerato hasta los 33 años, y en apenas cuatro, obtiene la licenciatura en Derecho. Como abogada, periodista y diputada defenderá los derechos de la mujer y el niño, y en 1931 será la máxima responsable en el logro del derecho al voto de las españolas. Este éxito supuso su posterior ostracismo político, que ella reflejó en su libro El voto femenino y yo: mi pecado mortal. Se exilió a La Argentina en 1936, dejando un testimonio único sobre la confrontación española en su libro: La revolución española vista por una republicana.