Nacida en Alemania, en el seno de una familia de origen judío, nunca lo tuvo fácil, pero siempre supo estar en los momentos oportunos para aprovechar las pocas oportunidades que se les otorgaban a las mujeres en el ámbito universitario y científico. Aprovechó que se le ?permitió? asistir a clase en la Universidad de Erlangen hasta conseguir que se revocara la prohibición de examinarse que le permitiría acceder oficialmente a los estudios. No dudó en marchar a Gotinga para recibir (como oyente) las enseñanzas de los mejores matemáticos de la época. Hay que recordar que La Universidad de Gotinga era entonces el referente de la excelencia científica. Tras doctorarse se trasladó definitivamente a Gotinga donde colaborará con eminentes matemáticos de la época como David Hilbert.